Presentación

Saludos!
Bueno pues estas son las experiencias de mi paso por Islandia. Un año que ha marcado un antes y un después en mi vida y en mi forma de pensar a cerca del mundo en el que vivimos. Buen país, buena gente, buenos paisajes, en resumidas cuentas, buena Erasmus.

martes, 27 de noviembre de 2007

Con Marta por la isla

A ver, a ver... Ah! sí! La llegada de Marta... Pues nada, la misma tarde que venía recibí una llamada suya desde Londres. Su voz era como... no sé... algo compulgida, asustada... Así que le pregunté qué pasaba y explotó. Se había olvidado el pasaporte (bueno, en verdad, había cogido el caducado) y pensaba que no iba a poder volar. A esto que, medio tranquilizandola medio pensando en qué hacer, empecé a poner en practica mis conocimientos adquiridos y le dije que me pasara al muchacho para hablar con él...EN INGLÉS!! Tras un ratillo, preguntando si había otras opciones y con Marta un poco estresadilla (también es normal), resultó que el tio hablaba español y que ella podía volar con el D.N.I. Me imagino su cara cuando empezó a escuchar que el tío me hablaba en español... Moraleja: en la guía del buen guiri, en la página 1, pone que la primera pregunta que se tiene que hacer cuando se está fuera de España es: Do you speak spanish?

Después de unos primeros días de contacto con la ciudad (ver post: La ciudad); de la visita al Blue Lagoon, es una piscina de aguas termales en las que se da el contraste entre la temperatura del ambiente (0ºC ese día) y la temperatura del agua (40-45ºC creo recordar); y del concierto de Páll Óskar, es un cantante famoso por estas tierras. Por cierto, el concierto genial (yo pensaba que iba a ser un tanto aburrido pero estuvo lleno de anécdotas)...






... Bueno, pues el lunes, nos alquilamos un Yaris para conocer un poco más la isla. El primer día fuimos al Golden Circle, yo ya había estado allí, pero esta vez estaba todo congelado y, por tanto, algunas vistas ganaban mucho más, si cabe.


El parlamento.




Los geysers.




Gullsfoss.






El segundo día nos fuimos a Snaefellsness, es una región situada al oeste de Islandia. Se caracteriza por la cantidad de fiordos que se cruzan en todo su camino. Hay una carretera que da la vuelta a la región por toda la costa. En su extremo más occidental tiene un pequeño glaciar, Snaefellsjökull. Cuando se llega a este punto hay dos opciones: bordearlo, más kilómetros y una vista que sin ser mala no es la mejor; o, adentrarse por la falda de glaciar. Pero claro, con un Yaris... por mucha rueda con clavo que lleve... es un Yaris, asi que fuimos rodeando el glaciar. Tras 7 u 8 horas de viajes y una vez visitado Hellissandur, Rif, Ólasvík, Grundarfjördur y Stykkishólmur volvimos a casa.









El tercer día y el último con el coche, nos fuimos a visitar la zona sur de Islandia. Pasamos por Sellfoss, Hellas y Hvolsvöllur. Todas estas ciudades están destinadas a alojamientos de los "valientes" que se disponen a escalar Vatnajökull, otro de los glaciares de Islandia. Nosotros, que somos más cómodos, volvimos a intentarlo con nuestro amigo Yaris, pero no pudimos subir más de varios kilómetros. Lo justo para que empezaran las carreteras con capas de nieves, donde ya el coche decía que nos fueramos a patitas que él no tenía ganas de subir. Pero claro, nosotros queríamos llegar a Landmannalaugar, un lugar conocido por sus montañas de colores, que está situado justo en la falda del glaciar. Así que después de intentarlo por dos caminos distintos con mismo resultado, nos quedamos contentos de haber visto el Hekla, un volcán que todavía pega algún sustillo que otro, el último en el 91, y que se sitúa a pocos kilómetros del glaciar. Decidimos seguir por la carretera, todos los anteriores intentos eran por un camino de cabras típico de esas zonas elevadas, hacia Skógar y Vík.







Antes de llegar a Skógar nos paramos para ver la catarata Seljalandsfoss, que sin ser una catarata muy "vistosa" (teniendo en cuanta que las demás se salen), tiene el atractivo de que un camino te permite pasar por detrás de la catarata, como los típicos de los cuentos que detrás está la maravillosa gruta con todos los tesoros, pero sin la gruta. Además estaba algo congelado y cabía la posibilidad de pegarse un remojón por un pequeño descuido, así que decidimos seguir el camino.




En Skógar está una de las cataratas más impresionantes de Islandia, Skógarsfoss, donde el río se precipita desde una altura de 60 metros y el sonido del agua al chocar contra el suelo hace que parezca aún más impresionante. Además, los insensibles de los islandeses han puesto una escalera en la parte derecha de la cascada para subir hasta arriba y, claro, yendo con Marta, aún recuerdo subir y bajar por dos veces las escaleras de la Plaza España en Roma, estaba claro que la niña iba a querer subir... Y allí que fue el tío, unos 100 peldaños por detrás de ella, pero subiendo.





Luego intentamos llegar hasta Vík, un pueblo con encanto y mucha mitología, pero dado que ya anochece a eso de las 5 de la tarde, decidimos que era mejor que volviesemos porque ibamos a ver poquito.

Los dos días siguientes fueron más tranquilos, visitas a otras zonas de la ciudad y poco más...





Gracias por la visita Marta, se me ha hecho cortísimo estos once dias pero me lo he pasado de escándalo.

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Primeros pasos en Islandia

Cuando se decide venir a Islandia, existen una serie de pasos que hay que seguir para no parecer mucho más guiri de lo que ya se es. Seguramente se me olvidarán muchas cosas, así que si tenéis dudas o queréis saber algo más sobre algún tema, sólo tenéis que decirmelo. Para calcular cuantas coronas son un euro, sólo hay que multiplicar las coronas por dos y pasarían a pesetas. Luego el paso de pesetas a euros ya lo conocéis todos.

1º.- EL VIAJE: En el tema billetes no me voy a meter, más o menos si se compra con tiempo te puede salir "barato", teniendo en cuenta que los precios no bajan de los 130 euros (que yo sepa). Es indispensable el pasaporte aunque el D.N.I también te lo permiten, pero yo no me arriesgaría y si se puede ir con el pasaporte mejor. Una vez en el aeropuerto, olvídate de la maleta y vete al duty free porque va a ser la última vez que veas precios medio coherentes, es lo que hace todo el mundo... Cuando ya tengas todo, un autobús os llevará hasta Reykjavik (el aeropuerto está en otra ciudad, Keflavik) por unas 1.200 koronas (kr.), en un trayecto que dura alrededor de 45 min. Por lo de cambiar el dinero no os preocupéis que lo podéis hacer en la misma terminal del aeopuerto. Se puede optar también por un taxi, pero lo de ser taxista tiene que ser una cosa de que uno no se hace, sino que nace, y la mayoría, sean del pais que sea, intentan aprovecharse del pobre guiri.
Por cierto, tened cuidado con lo que metáis en la maleta. Si queréis más información entrad en la página del Consulado de España en Islandia.
http://www.mae.es/es/MenuPpal/Paises/ArbolPaises/Islandia/Recomendaciones+de+viaje/recoIslandia.htm

2º.- EL CLIMA: Durante los meses de verano, los días son larguísimos. Recuerdo que cuando llegué anochecía a eso de las 23.00. Ahora en Diciembre, las horas de luz se reducen a 6 (y llegará a ser menos), desde las 10 de la mañana hasta las 16.00. La temperatura, suele oscilar entre los 10ºC y los 15ºC en los mejores meses y, actualmente, oscila entre los 4ºC y los -5ºC, pero lo peor está aún por llegar. Como dicen los nativos, aquí no hace frío, aquí lo que se va es mal abrigado. Normalmente llueve o, como ahora, nieva, así que unos pantalones y un chaquetón que no cale el agua no serían mala idea. Después de todo, tengo que decir se soporta ¡eh!, que yo soy de Huelva y no me quejo... mucho. También es que el día antes de venir estaba pegándome un remojón en la playa, cuando podía estar entrenándome en la montaña... Así que empecé con mal pie.

3º.- ALOJAMIENTO: Lo del alojamiento se encarga la universidad una vez se ha aceptado vuestro ingreso. En mi caso, opté por las opciones piso o residencia de estudiante y me concedieron la segunda. La verdad que en ese aspecto me siento afortunado pues, Aurora Guesthouse, nuestra residencia, es como un chalet de 16 habitaciones, con 4 cuartos de baños, una cocina y un pequeño comedor, todo bastante bien. Además, el casero sólo se deja ver una vez al mes, así que estamos mejor que queremos. El precio de las habitaciones oscila entre las 35.000 kr. y las 45.000 kr. dependiendo del tamaño y demás (como en todos sitios). La residencia cuenta con servicio de lavandería, televisión y Wi-Fi, todo incluido en el precio (joe! parece que voy a comisión con el dueño). La otra opción es más barata pero nunca se sabe lo que te puede tocar. En general, yo creo que son las dos mejores opciones.

4º.- DOCUMENTOS: Una vez que ya estéis instalados y con domicilio fijo, deberéis ir a haceros el kennitala, algo así como el D.N.I para inmigrantes. Éste es indispensables para matricularos en la universidad y para abriros una cuenta en el banco, por ejemplo. También es importante, si vuestra estancia es superior a 6 meses, que vayáis a la embajada española en Islandia, que se encuentra en Kopavogur, cerca de la capital, para haceros un permiso de residencia, que también os sirve como permiso de trabajo, por si os animáis a ganaros unas pelillas.

5º.- TRANSPORTE: Evidentemente el transporte más usado por los estudiantes son los autobuses. A diferencia de lo que estamos acostumbrados son puntuales, tal cual. En la universidad nos dan una tarjeta para usarlos cada vez que queramos, por el sólo hecho de ser Erasmus, así que pedirla.

6º.- LA COMIDA: Seáis de donde seáis y por muy mal que comáis, echaréis de menos la dieta mediterránea, pero algo malo tendrían que tener los islandeses, ¿no? El mejor sitio para hacer la compra es el Bonus, algo así como el Mercadona de España. La variedad de productos no es muy alta y lo que no son productos elaborados tienen precios prohibitivos. Esto no quiere decir que no se puedan comprar, pero sí, que no se puede hacer ensaladas todos los días como ocurre en España.
Especial atención tendréis que poner con la fecha de caducidad. Aquí los productos lácteos, por ejemplo, no duran más de una semana y cuando dicen que caducan es que al dia siguiente tu leche ya es queso, no hay vuelta de hoja, y por supuesto ni se os ocurra dejarla fuera de la nevera.

7º.- EL ALCOHOL: Lo sé, todos venís aquí a estudiar y algunos ni beberán incluso, pero para todos los demás deciros que aquí hubo ley seca hasta hace unos 30 o 40 años. Consecuencias, aún hoy, el alcohol sólo se puede comprar en tiendas especializadas, por lo que se reduce el número a un total de una única tienda en la capital, VinBud. Hay que destacar, que las cervezas que os encontraréis en los supermercados y 24h. son sin alcohol o con un grado mínimo, tened cuidado... los que bebais.

8º.- LA VIDA NOCTURNA: Olvidaros de la típica Erasmus en la que se sale todos los días. Claro que podéis salir, pero lo mismo os encontráis un poco solos. Los bares cierran a eso de la una durante la semana, los jueves lo mismo se aguantan un poco más pero tampoco se trasnocha y sólo los fines de semanas se puede quedar uno en la calle hasta altas horas de la noche. Habreis observado que digo altas horas de la noche y no tempranas horas de la mañana, ¿no? Imaginaros el por qué.
El precio medio de una cerveza de 0.5 L. en un bar es de unas 650 kr. aunque éste oscila, claro está. Los chupitos varían alrededor de las 500 kr. Y, por último, siento deciros que no os podré ser de mucha ayuda en el precio de las copas. Aún no me planteé pedir precio por ésta.
A parte de los precios, cuando salgáis es importante llevar con ustedes la tarjeta del banco, más que nada porque es el único documento donde sale el kennitala y una foto tuya. En verdad, yo creo que ésto es un negocio del gobierno para que tiremos de la tarjeta cuando estemos más felices de la cuenta...
Por último, reseñar que aunque por el día son muy civilizados, por la noche los islandeses cambian. Bien por la ley seca a la que aún no se han acostumbrado o bien porque se desatan sin más, raro es el fin de semana que dos islandeses no se están dando guantazos. Ustedes lo único que tenéis que hacer es pasar de largo y, nunca, ayudar a un borracho a nada. Aunque esté en el suelo pegando sus últimas cojetadas, puede que sólo esté haciendo el tonto y cuando vuelva a abrir los ojos pensar que fuistéis ustedes los que lo tiraron, él o los amigos... Así que ya sabéis, ustedes a vuestra bola.


Bueno, pues, por ahora, yo creo que es lo más destacable que os puedo comentar. Si falta algo, que seguramente sea que sí pero mi cabeza en época de exámenes tampoco me permite pensar mucho más, me lo decís y ya iré añadiendo o contestando personalmente a cada uno. Sin más, espero que os sirva de ayuda como primer contacto.

Un saludos a todos y si tenéis la oportunidad de venir no os lo penséis.